Qué rol cumplía en la causa AMIA cada uno de los procesados, según Bonadio
El juez federal le otorgó a cada uno de los imputados un rol preciso en la maniobra denunciada por el fiscal de la causa AMIA Alberto Nisman días antes de su muerte.
Al impartir las órdenes de procesamiento y detención, el juez federal Claudio Bonadio le otorgó a cada uno de los imputados un rol preciso en la maniobra denunciada por el fiscal de la causa AMIA Alberto Nisman días antes de su muerte.
Según indicó, la expresidenta Cristina Kirchner impartió las ordenes para encubrir a los iraníes acusados por el atentado, mientras que el exsecretario de Legal y Técnica Carlos Zannini, «tuvo una intervención activa en todo el proceso de elaboración y puesta en marcha del Memorando» bilateral.
«Si bien negó su participación en los sucesos investigados, las constancias referidas, permiten afirmar que tuvo una intervención activa en todo el proceso de elaboración y puesta en marcha del Memorando», explicó Bonadio.
El entonces canciller Héctor Timerman, a quien Bonadio dictó prisión domiciliaria por su delicado estado de salud, ocupó según el juez un rol clave en la maniobra delictiva denunciada, pues encabezó las negociaciones, la redacción y la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán.
«Timerman, sin tener siquiera la mínima formación universitaria mucho menos ningún conocimiento jurídico -ni que decir de procesal penal o de derecho internacional-, redactó un instrumento de tal naturaleza e importancia, sin contar con la opinión de expertos y de los organismos especializados de cancillería, a los cuales ni siquiera consultó», cuestionó el magistrado.
Respecto al dirigente Luis D Elía, quien también fue detenido en las últimas horas, el juez indicó que fue el «intermediario entre el gobierno nacional y personas vinculadas al régimen iraní, trasmitiendo comunicados en miras de avanzar en la puesta en marcha del plan delictivo investigado, como así también lograr un acercamiento comercial a nivel estatal entre ambos países».
En tanto, indicó que el exlíder de Quebracho Fernando Esteche «tenía conocimiento de las negociaciones llevadas a cabo» con Irán» y de los «intereses que enmascaraba la firma del Memorando», por lo que tuvo un rol «imprescindible».
Ante el caso de la exprocuradora del Tesoro de la Nación Angelina Abbona, a quien procesó sin prisión preventiva, advirtió que si bien «entre sus facultades ninguna la habilitaba a participar en la elaboración de pactos o tratados internacionales», ella encabezó a pedido de Cristina Kirchner las delegaciones argentinas que mantuvieron reuniones con los iraníes entre 2012 y 2013.
«La finalidad perseguida con su designación como responsable de la comitiva era mantener en secreto el contenido de esas reuniones, monitorearlas y posibilitar el objetivo perseguido de suscribir un acuerdo con Irán que normalice las relaciones entre los Estados, que conllevaría a garantizar la impunidad de los imputados en la causa AMIA», agregó.
En tanto, al extitular de la Agencia Federal de Inteligencia Oscar Parrilli y al diputado Andrés «Cuervo» Larroque los consideró partícipes necesarios: el primero de ellos «conocía – por su pública y notoria cercanía con la exmandataria, los movimientos vinculados a los hechos ilícitos aquí reprochados», advirtió.
En tanto, Larroque fue «intermediario entre las autoridades del Poder Ejecutivo Nacional y Jorge Khalil», referente de la comunidad islámica en la Argentina, «por intermedio de Luís D ´Elía y Fernando Esteche», insistió.
Además, señaló que el exsubsecretario de Política Criminal del Ministerio de Justicia Juan Martín Mena «participó en la elaboración» de una presentación de Timerman ante el Senado en busca de la aprobación del Memorandum de Entendimiento, que luego sería declarado inconstucional por la Justicia.
Por su parte, el supuesto espía Ramón Allan Héctor Bogado tuvo un rol «clave en las maniobras ilícitas descriptas, pues poseía contactos en el entorno del Poder Ejecutivo Nacional y con referentes del régimen iraní», señaló.
«Es posible sostener que» Héctor Timerman, Jorge Khalil, Fernando Esteche, Luis D Elía, Carlos Zannini y Cristina Kirchner, «atento a sus vínculos, siendo la última nombrada senadora nacional electa, de continuar en libertad podrían entorpecer el accionar judicial», sostuvo el juez.
Por ello respecto a ellos decretó la prisión preventiva, en tanto que sólo los procesó por los mismos delitos pero sin detención a Eduardo Zuain, Oscar Parrilli, Andrés Larroque, Angelina Abbona y Alan Bogado.
«Estos funcionarios del Estado Nacional, abusando de las facultades inherentes a los cargos que ocupaban, traicionaron los intereses nacionales tradicionales e históricos y los de las personas damnificadas por los atentados, participaron en la elaboración del instrumento cuestionado y procuraron su puesta en marcha, en miras de conseguir la impunidad de los ciudadanos de nacionalidad iraní imputados por el atentado a la sede de la AMIA», sentenció el juez.
