El asalto a las unidades se produjo con violencia y uso de la fuerza y contra la voluntad de corredores y choferes que se resistieron a entregar los vehículos.
La Municipalidad lamenta que nuevamente reine la anarquía y la ley de la selva en las calles de la ciudad, cómo pasó meses atrás.
Esto sucedió luego de que se les hiciera una oferta a los trabajadores, para resolver sus reclamos, a pesar de ser un paro ilegal, sin previo aviso y sin apoyo de los gremios.
Desde el Municipio rarificamos el derecho a huelga; pero repudiamos las acciones delictivas cómo está de apropiarse de bienes públicos que son elementos fundamentales para la prestación del servicio esencial de recolección.
Vamos a insistir ante la Justicia para restablecer el orden a la brevedad y evitar peores consecuencias para los vecinos.