Parece que Justin Bieber debe estar pensando demasiado en su ex, Selena Gómez y la nueva relación que ella mantiene con The Weeknd, porque de otra manera no se puede entender cómo es que el cantante se dejó fotografiar así en pleno Hollywood.
El canadiense fue interceptado por los paparazzis de TMZ cuando salía de un restaurante en Los Ángeles y se lo vio con una sospechosa mancha en sus pantalones. Justin llevaba puestos unos joggings grises, que hacían que todo «eso» resaltase mucho más.
Mientras caminaba hacia su camioneta, el autor de «Baby» fue consultado por la relación que mantiene Selena con The Weeknd, pero Justin eligió no contestar e ir directo al vehículo.
