Así se expresó el Senador Julio Martínez, ante el descubrimiento de una avioneta boliviana que se estrelló con 324 kg de cocaína a bordo en cercanías de la localidad de Aviá Terai (Chaco).
Martínez recordó que en marzo de este año presentó el Expte. S-500/23 pidiendo explicaciones al Poder Ejecutivo Nacional acerca del funcionamiento de los radares integrantes del el Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial (SINVICA), cuya operación está a cargo del Comando Conjunto Aeroespacial, organismo militar encargado de vigilar en forma permanente el espacio aéreo argentino.
En el mismo se consultaba acerca de la «ubicación, horas diarias de operación, personal afectado y Tránsitos Aéreos Irregulares (TAI) detectados e interceptados en cada caso desde el 01 de enero de 2022 a la fecha», a la vez que informara si se había detectado «el ingreso al país el helicóptero Robinson R44 utilizado para el intento de fuga del narcotraficante Esteban Alvarado, y si dicho ingreso lo hizo como un vuelo cooperativo o no cooperativo».
Ante la falta de respuesta a dicho pedido de informes, el senador radical insistió con las mismas preguntas en el Informe 136 del Jefe de Gabinete de Ministros, Agustín Rossi, frente al Senado de la Nación.
La respuesta de Rossi remitió al Informe 135 dado en Diputados, donde respondió sobre la cantidad de radares, informó que los mismos «operan los 365 días del año, durante las 24 horas del día» y que «la frontera norte se encuentra radarizada en un 87%». «Lo que omitió deliberadamente responder es cuantos Tránsitos Aéreos Irregulares (TAI) fueron detectados desde el 01 de enero de 2022 a la fecha», indicó Julio Martínez, quien prometió seguir exigiendo explicaciones al Gobierno Nacional.
«No cabe ninguna duda que el ingreso de droga a nuestro país no forma parte de las preocupaciones del kirchnerismo. Una respuesta tan indolente como la del Jefe de Gabinete revela la negligencia, rayana con la complicidad, de un Gobierno que se llena la boca hablando de radarización, pero que parece no mirar o no encender los radares para liberar el paso de las avionetas cargadas de droga», analizó Martínez.
«Tan evidente es su actitud, que si las avionetas no se caen, el Gobierno ni se entera», finalizó.