El llamado a una jornada nacional de protesta se hace en coincidencia con el paro nacional de ATE y en acuerdo con la CTA de los Argentinos, cuya dirección ya hizo pública su voluntad de adhesión a la convocatoria. En la Rioja la CTA Provincial ya tiene previsto para ese día la continuidad del Plenario donde vienen participando diversos sectores sociales de la provincia, en pos de una “multisectorial” y a la que posiblemente y con ese propósito se sume la CTA referenciada en Normando Ocampo.
En el trascurso de la semana se podrá ampliar información en este sentido, lo mismo con las acciones convocadas por Tupac para el martes 16, en pos de la libertad de Milagro Sala y contra la criminalización de la protesta, a la que adhirieron diversas organizaciones nacionales.
El llamado de ATE y de las centrales tiene como punta de lanza la defensa ante la violencia institucional y el atropello, que se va cobrando en despidos el futuro de 30 mil trabajadores del Estado, una número que en opinión de los sindicalistas de la Central, irá en aumento montada a la cada vez menos creíble excusa de los “ñoquis”, solo funcional al desguace del Estado.
Prueba de esto es el hecho de que, los puestos de trabajo, áreas completas y programas de ampliación de derechos, no se suplen con otros trabajadores. Los “ñoquis” no son la preocupación del oficialismo sino la excusa para hacer revanchismo político, estigmatizando a los trabajadores, pero por sobre para cumplir con el mandato de las políticas neoliberales, a las cuales el gobierno adhiere, de achicamiento del Estado en favor del negocio de las corporaciones.
En resumen, el plenario resolvió como consignas para el 24 de Febrero:
· PARITARIAS LIBRES
· NO A LOS DESPIDOS
· NO A LA REPRESIÓN
· NO A LA CRIMINALIZACIÓN DE LA PROTESTA SOCIAL
· NO A LA VIOLENCIA INSTITUCIONAL
· EN CONTRA DE LA QUITA DE LAS RETENCIONES A LA MINERÍA
“La mirada desde la política sindical”
En el plenario el Secretario General de la Central Nacional, Hugo Yasky, caracterizó la gestión de “cambiemos” como “un gobierno de ocupación que se debate entre el poder especulativo- financiero y el de las corporaciones, mientras sigue gastando a cuenta de lo acumulado por el gobierno anterior”.
También se señalaron con preocupación las acciones de las CGT “los gordos” y el presidente Macri, quienes propician un pacto social donde las variables de ajuste serán los trabajadores y los derechos del pueblo.
Se habló de una subjetividad que favorece al oficialismo, pero también de “tiempos de definiciones profundas”. El razonamiento sugiere que darle tiempo a la gestión de “cambiemos”, como lo propicia la burocracia sindical encarnada en Moyano, solo empeora las cosas. A medida que se avance en el desguace del estado y el desempleo, más difícil será pelear por condiciones salariales.
En referencia a esto Yasky disparó “No podemos delegar los tiempos de la confrontación”. Respeto a esto último se propició que se les acabe “el estado de gracia” del que goza el “macrismo” y aparezca el fantasma del helicóptero, teniendo en cuenta que tampoco la clase trabajadora debe caer en el “espejismo del helicóptero”, esto último en alusión a quienes creen que el gobierno va explotar espontáneamente.
La normalidad artificial propiciada desde los medios y el miedo al despido, vienen estancando la reacción de los trabajadores, y es lo que se debe revertir con lucha y organización.