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El estricto régimen de la cárcel de Dolores que deben cumplir los rugbiers

Los 10 jóvenes acusados por el asesinato de Fernando Báez Sosa están en su debut en el ámbito carcelario.

Los 10 rugbiers detenidos por el asesinato de Fernando Báez Sosa comenzaron su estadía en el ámbito penitenciario de Dolores, apenas ingresaron, los jóvenes fueron sometidos a una revisión médica.

 

Los internos pueden recibir visita los jueves a partir de las 9 hasta las 17, los días de semana, y de 8 a 13, los fines de semana, indicaron fuentes penitenciarias.

 

En el caso de Máximo Thomsen, Lucas y Luciano Pertossi, Matías Benicelli, Alejo Milanesi, Juan Pedro Guarino, Enzo Comelli, Blas Cinalli, Ciro Pertossi y Ayrton Viollaz se programó un horario especial: es desde las 17 a raíz de la atención mediática que recibe el caso y las amenazas que hicieron circular algunos reclusos.

 

Según indicaron desde el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), la visita de las familias de los jóvenes de Zárate durará entre dos y tres horas. Y se dispondrá un operativo con mayor cantidad de agentes. Quieren evitar que se crucen con otros presos.

 

El SPB asegura que ese régimen especial no se extenderá en el tiempo. Sus autoridades quieren dejar en claro que los rugbiers no recibirán un trato VIP, pese a que estarán aislados de los internos «más pesados» y que compartirán una celda con cuchetas para todos en el sector nuevo de la prisión inaugurada en 1877.

 

En los pabellones de población común, los detenidos permanecen en la celda de las 18 hasta las 20. Solo pueden salir al patio los días miércoles de 15 a 17 y de 9 a 12, indicó en un hábeas corpus la Comisión Provincial por la Memoria (la CPM).

 

Según un informe de la Defensoría del Pueblo bonaerense, los reclusos realizan dos horas de recreación por día, una hora a la mañana y una por la tarde: de 13:30 a 14:30 los trabajadores y los estudiantes; y luego el resto, de 15:30 a 16:30.

 

Respecto a la comida, el organismo que dirige Guido Lorenzino señaló que las autoridades de la prisión aseguran que los presos reciben cuatro comidas diarias: desayuno, almuerzo, merienda y cena. Con un aporte nutricional promedio de 2500 calorías.

 

Sin embargo, la CPM resalta que en el pabellón 6 de «Admisión» los reclusos denuncian que «solo les entregan huesos con un poco de grasa y fideos pegados». En consecuencia, dependen de los alimentos que pueden llevarles sus familiares en las visitas o de la solidaridad de sus compañeros.

 

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