El nuevo ministro del Interior, Diego Santilli, ha comenzado su labor como la principal figura política de la gestión libertaria, con el objetivo de lograr consensos con los gobernadores para llevar a cabo las reformas de “segunda generación” propuestas por el presidente Javier Milei. “El Colorado” inició una serie de reuniones bilaterales el pasado viernes con mandatarios provinciales, comenzando con Ignacio Torres de Chubut y Raúl Jalil de Catamarca, el mismo día en que presentó su renuncia a su cargo como diputado.
Estos encuentros son fundamentales, ya que todavía no se ha redactado el proyecto de ley del Presupuesto 2026, ni se han desarrollado las reformas laboral, tributaria y del Código Penal que el oficialismo pretende implementar en esta nueva etapa de gestión, luego de haber sido respaldado en las urnas el 26 de octubre.
Las reuniones continuarán mañana con los gobernadores Marcelo Orrego de San Juan, Martín Llaryora de Córdoba y Gustavo Sáenz de Salta. Sin embargo, no participarán los cuatro gobernadores más cercanos al kirchnerismo, quienes se oponen fuertemente a Milei: Axel Kicillof de Buenos Aires, Gildo Insfrán de Formosa, Ricardo Quintela de La Rioja y Gustavo Melella de Tierra del Fuego, estos últimos no firmaron el Pacto de Mayo.
Aparte de avanzar en las conversaciones necesarias para las reformas, Santilli deberá demostrar su capacidad política para manejar las tensiones internas dentro de la coalición libertaria, tensiones que llevaron al desgaste del ex jefe de Gabinete Guillermo Francos.
Santilli contaba con un mandato vigente como diputado del PRO hasta el 10 de diciembre y había sido reelecto en las elecciones del 26 de octubre, donde ocupó el primer lugar en la lista de la alianza entre La Libertad Avanza y el partido amarillo, tras la renuncia de José Luis Espert. Su liderazgo en la campaña, que surgió a raíz del escándalo que relegó a Espert, le permitió ganar por un estrecho margen las elecciones frente al peronista Jorge Taiana, lo que le valió elogios dentro de las filas libertarias.
Este ascenso en la estructura política de la coalición se consolidó con su nombramiento como ministro del Interior, ocupando así el lugar que dejó Francos en la “mesa política” de La Libertad Avanza, donde se reúnen los principales referentes del espacio cada martes.
